sábado, 25 de julio de 2009

Bolígrafo mudo
Hundida en un insomnio profundo
He decidido gritar mi deseo hacia ti
Como mi timidez, tu indiferencia y la distancia
En esta desierta madrugada
No me permiten llamarte
He tomado el primer bolígrafo y un trozo de papel
a mi alcance para expresar mis indebidas pretensiones.
Sì lo he dicho y lo cumpliré; con los nervios ante todo
escribiré en medio de esta lóbrega tempestad
como podrás observar el deseo a veces
puede ser prohibido, reprimido y censurado
y hoy te hablare de estos que en mi
al reverso del espejo se encuentran.
Yo tan frágil, tan inocente, tan tímida, tan incrédula…
En plena oscuridad, si, solo en la oscuridad
De mi habitación.
Más bien confesé todos mis más íntimos pecados.
Terminando agotad, cual si fuera trabajo arduo y riguroso,
Dormiré un poco para darme valentía al despertar
Y dirigir este trozo de incoherencias a ti.
Pero, cual fue mi sorpresa al despertar…
Y recordar que cogí el primer bolígrafo que se encontraba a mi alcance y un trozo de papel
Que si mis delirios fueran delito,
Pena de muerte fuera yo condenada y sin derecho a fianza me encontrara,
Si mis deseos fueran pecados,
No alcanzaría a tocar el paraíso
Ni siquiera conocerlo podría al morir.
En fin, te diré ahora que ayer me confesé ante un trozo de papel
Más no una pluma que sirviera totalmente, un bolígrafo sin matiz, una pluma inservible.

Acarícieme, bésame, devórame, respírame

Acarícieme, bésame, devórame, respírame...
Bésame como si mis labios en lugar de ser delgados fueran carnosos,
Bésame como si en mis labios existiera agua rica de manantial para calmar tu sed.
Acaricia mi cuerpo como si en el buscaras un analgésico para calmar tu dolor,
Devórame tal si fuera yo fruto que sacie tu deseo.
Respírame tal si fuera fina fragancia de una bella flor.
Respírame como el aire tan indispensable para la vida, para tu propio ser.
Bésame, acaríciame, devórame, respírame tal sino fuera yo.

Te odio

Odio que tus carnosos labios se abran para formar una tierna sonrisa,
Odio que tus cabellos formen un rizo perfecto,
Odio tener que leerte y anhelar que escribas algo sobre mí,
No en mi espalda, no en mi cuerpo, sino referente a mí.
Odio a tu aquella amiga, que te saluda con un fuerte abrazo y al cual tú le correspondes.
Odio tu risa burlesca tal si fuera de llena que ríe después de matar.
Odio que te alaguen y te hagan sentir importante o peor aún que les creas.
Odio que seas tan tú.

martes, 14 de julio de 2009

mi vida es como un papalote llevada por las corrientes del viento y las cirscuntancias de la vida. La música también es vida y en esa canción se encuentra un fragmento de mi vida pasada que deceo enterrar hoy...
Existen señales que no se puede evitar, a veces señales tan simples como una canción. Hoy esta fue mi señal y con esta doy por vencida mi fatal obsesión. El orgullo no se puede esconder sin embargo, la dignidad siempre debe ser respetada.
La vida quita y pone. Ayer me quito pero, ¿Quién dice que hoy, no me pueda ofrecer cosas mejores?

Segundo acto

En este escenario en el cual practicaré la obra, tomaré y lo haré mío tal espacio como si fuera el hombre deseado. Así también míos serán los errores y las caídas. El escenario en el cual cada paso será la practica, cada momento en la escena será un ensayo, al fin y al cabo el auditorio es nulo.

viernes, 10 de julio de 2009

Locuras

Si yo fuera poeta te haría el amor CON PALABRAS...